La Fundación Semillas Doradas nace del profundo deseo de suplir y dar respuesta a la necesidad de educación en la vida de las Familias de nuestra sociedad. Consideramos que la Familia al igual que los ámbitos educativos son un marco referencial imprescindible para la incorporación de un nuevo ser humano a la sociedad; es por eso, que toda siembra que se realice en ella siempre será valiosa. De allí toma sentido nuestro nombre, sembrar semillas con valor de oro que favorezcan el desarrollo y madurez integral de la familia.

Estas “semillas doradas” permitirán que el potencial encapsulado en cada integrante de la familia pueda ser manifestado en plenitud en los diferentes roles y áreas de la vida familiar.
Es por eso, que al sembrarlas no solo estamos educando niños, sino que estamos “preparando y capacitando a las generaciones” que favorezcan y beneficien directamente a la sociedad. Como Fundación asumimos no solo el proceso de sembrar, sino el de cuidar, educar y fortalecer a la familia, estableciendo fundamentos firmes en principios de una vida integral, equilibrada y plena.